jueves, 9 de junio de 2011

Tu nombre

Veo tus ojos a la distancia
Mediante un ave amarilla,
A esa que sonríes con esmero
A esa que se comunica con el viento.

Porque al leer tu nombre
La inspiración invade la habitación
Pronunciaré tu nombre
Hasta el fin de la creación.

El eco de tu nombre
Se queda en la mente al pronunciarlo
El eco de tu nombre
No son letras, es un canto.

Porque al escuchar la primera letra,
El pensamiento lo autocompleta
Porque al escuchar la ultima letra,
El pensamiento te recuerda.

Al dormir, pronuncio tu nombre
Lo grabo en cada esquina
Para que su eco me cobije
Para que sueñe cada día.

Leo tu nombre,
Lo pronuncio dos o más veces
Mientras escribía este poema
Pronuncié tanto tu nombre
Qué así lo guardé, (tu nombre).txt